El comenzar la Semana Santa, el padre Francisco Mukul Domínguez, párroco de la Purísima Concepción y San José invitó a que está sea una semana de reflexión, perdón y vivir en comunidad, pero sobre todo que cada uno cargue su cruz con alegría, aunque estén enfermos y tengan problemas, que el sufrimiento se lleve con la oración para estar cerca de Jesús.Ayer, unos tres mil fieles participaron en la misa del Domingo de Ramos y en la bendición de palmas, ceremonia que se celebró en el campo deportivo Hidalgo, en donde el presbítero invitó a todos los católicos a que carguen su cruz con humildad y alegría y también ayuden a Jesús a cargar su cruz.
“Vivamos esta semana de gracia y bendición de amor y misericordia de Jesús y seamos un pueblo consagrado a Dios e iniciemos esta Semana Santa con un corazón agradecido y celebremos con humildad y alegría los grandes acontecimientos y misterios de nuestra fe”, invitó el párroco.
La celebración de la misa del Domingo de Ramos, como cada año, se celebró en el campo Hidalgo y comenzó con la entrada del padre Francisco Mukul quien antes bendijo las palmas de los fieles en el parque de la Paz, para luego partir hacia el campo Hidalgo.
“El celebrar los misterios de nuestra fe es importante hacer un compromiso cada uno de nosotros para que su muerte y resurrección no sea en vano; sino sea un acontecimiento que renueve nuestra vida y comprometa a revivir nuestra fe”, agregó.
“Es importante que reflexionemos lo que estamos pidiendo, aquí no va a pasar desgraciadamente pero recuerdo una parroquia en la que estaba que durante la Semana Santa ninguna cantina abría, porque todo mundo estaba en oración, estaba prohibido abrir las cantinas, pero eso aquí nunca va a pasar, pero no quita que reflexionemos lo que estamos celebrando, tanta celebración pero no quita que pensemos, oremos y participemos en la liturgia”, subrayó.
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