COMERCIANTES SE QUEJAN DE ILEGALES

Ante la llegada de la temporada alta en las próximas vacaciones de julio y agosto el comercio informal hace de las suyas.
Pues para esa misma temporada alta se prevé que incremente el número de vendedores ambulantes, por lo que ya empiezan a llegar a las principales playas del municipio.

Esta situación ha provocado la molestia de los empresarios de la localidad, quienes esperan una revisión al padrón de vendedores y reducir el número al mínimo, ya que aseguraron que el comercio informal está agravando más los ingresos de quienes puntualmente pagan sus impuestos.
Carlos Gómez explicó que el problema se da durante todo el año, pero se refleja más durante la temporada alta cuando el turismo empieza a mejorar y con ello, la venta de servicios.
Dijo que muchos de los comerciantes aprovechan las temporadas bajas para poder hacer mejorías a sus negocios, lo cual es considerado también como una inversión, pero lo grave es que mientras algunos hacen fuertes gastos con la esperanza de recuperarse en julio y agosto, pero a veces esto no es posible.
Comentó que muchos de los que venden en las calles y en las playas, lo hacen gracias al pago de un derecho mensual y gracias al cual, pueden ofertar sus productos sin mayor problema, mientras que el comercio establecido sólo lo hace en su negocio.
Quienes venden en la calle, no tienen que pagar otro tipo de impuestos y mucho menos se preocupan de los gastos de luz, agua, salarios y demás responsabilidades.