Cuando poco a poco se va retornando a la normalidad, aquí en el puerto vecinos solicitan la necesidad de reducir los niveles de contaminación auditivo ocasionado por el ruido que emiten comercios, carros de perifoneo o camiones de sonido.
Piden a las autoridades encargadas de que se establezca un determinado horario en estos servicios además de tomar en consideración otros factores como el desactivar el sonido cuando la unidad no esté en movimiento, disminuir al mínimo el ruido producido al pasar por escuelas, estancias, hospitales, iglesias, funerarias o asilos, no circular a una velocidad menor a los treinta kilómetros por hora y con los niveles de volumen de manera moderada.
Los quejosos solicitan a las autoridades tomen en cuenta ciertas recomendaciones de las cuales muchas son producto de las mismas denuncias ciudadanas, recomendando procuren realizar sus actividades en un marco de respeto hacia la misma población.
Cabe recordar que con anterioridad se extendió una notificación a los propietarios, encargados o responsables de vehículos equipados o negocios con bocinas buscando el reducir sus niveles de sonido.
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