De esta manera, y a pesar de que el cielo amaneció nublado y así se mantuvo durante gran parte del día, los pasajeros y tripulantes de los navíos Magic y Conquest arribaron en la terminal remota desde muy temprano, a las 7:09 horas y 7:50 horas, respectivamente. Los barcos atracaron poco más tarde, a las 8:17 horas y 8:47 horas procedentes de Galveston y New Orleáns. Luego, tras horas de diversión, esparcimiento y tranquilidad fijaron su destino con rumbo a la isla de Cozumel, Quintana Roo a las 17:00 y 18:00 horas.
Del total de pasajeros que llegaron en esta ocasión, 8,200, permanecieron en el puerto alrededor de 2,500 personas, que dieron animación, vida y colorido a las playas del lugar, así como a los alrededores y lugares de interés en la ciudad.
Como ya es costumbre, la mayor parte de los pasajeros compran paquetes para irse de visita a conocer diversos lugares del interior del estado, como el caso de la ciudad de Mérida, Uxmal, Telchac, Izamal, haciendas y rutas mayas.
Los que aquí prefirieron quedarse a pesar de que no había ni un rayo de sol al principio de la mañana, disfrutaron de su estadía en el puerto, principalmente acampando en la playa, la cual presentó en esta ocasión un gentío como muy pocas veces visto. Las familias departían con alegría en los restaurantes cercanos al malecón, comían en las palapas, saboreaban refrescos y agua purificada embotellada.
Otros más alegres le entraban con alegría a la cerveza, de manera que se les vio a los grupos de jóvenes universitarios tomarse sus caguamas en compañía de sus amigos y familiares cercanos.
En esta ocasión sí se dio el servicio de los paseos acuáticos, además los visitantes se divirtieron jugando al voleibol playero, las chicas se ponían bronceador a pesar de que no había sol y los más pequeños de la familia se pasaban un rato agradable mientras jugaban en la arena.
Prestadores de servicio, comerciantes y artesanos reportaron buenas ganancias, aunque hubo algunos que señalaron que las ventas no fueron del todo buenas a pesar de la gran cantidad de gente que permaneció en Progreso.
Venteros ambulantes del malecón como Rosario Palma, Abeladro García y comerciantes de la Casa de las Artesanías como Adriana Tamayo, Eduardo "Piccoro" Sansores, José Caamal y Ángel López mencionaron que las ventas no fueron las esperadas pues para ellos lo importante no es la cantidad de pasajeros que traigan las naves sino la calidad.
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