Un caballo perdió la vida cuando era transportado en la carretera Mérida-Progreso junto con otro equino, pues el conductor de la camioneta que jalaba el remolque que traía a ambos ejemplares dormitó y terminó entre la maleza a tan solo dos kilómetros de entrar al puerto.
El incidente se registró a la una de la mañana de este lunes cuando Jesús Eduardo Manzano Sulub 36 años tenía a su cargo el volante de una camioneta ford con placas ZAV-865-B, sin embargo el cansancio pudo más con su estabilidad pues se averiguó que los caballos eran traídos desde Guadalajara, donde tuvieron una exhibición en un concurso de charros.
Como consecuencia, el remolque terminó volteado, con uno de los equinos encima de otro provocándole la asfixia según aseguraron los agentes de la policía municipal que a la brevedad llegaron al punto de desastre.
Por su parte, el conductor salió con una crisis nerviosa y terminó por ser atendido por paramédicos de la SSP, quienes le recomendaron acudir a un nosocomio cercano, pero el hombre se negó pues prefirió quedarse para rescatar al equino que si seguía con vida pero con desesperación por salir, pues a constantes ratos pateaba el remolque donde era traído.
Trabajadores del predio de zona costera a donde pertenecen los ejemplare también llegaron al área para jalar por medio de una camioneta estaquitas Nissan el remolque y poner fuera de peligro al caballo que según se aseguró, su precio rondaba en los ciento veinte mil pesos.
Debido al intento fallido, los trabajadores se hicieron de palabras con los agentes en turno al grado de casi llegar a los golpes, para evitarlo la autoridad municipal solicitó refuerzos que pidieron a los presentes calma para salvar al animal que seguí encerrado.
Parte de las obstrucciones que tuvieron los elementos al frente del operativo fue que no se había presentado la Guardia Nacional, pues la zona federal era competencia de dicha dependencia. Producto de la impaciencia y frustración de no estabilizar al ejemplar, varios presentes comenzaron a llorar por la situación.
Debido a la movilización persistió también un embotellamiento de camiones de carga comercial y vehículos particulares que transitaban por la carretera, ya que se cerró uno de los dos carriles que dan paso al libramiento de entrada al puerto.
Cerca de las tres de la mañana finalmente se logró rescatar al equino con la ayuda de una polea atada a un remolque de mayor dimensión, aunque por el estrés y el maltrato que causó el impacto del remolque en el desvío se indicó que necesitará rehabilitación por medio de la atención veterinaria. La camioneta Ford resultó con múltiples destrozos, aunque para ello se hizo cargo la respectiva aseguradora.
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