En la escuela primaria “Álvaro Obregón”, gracias al trabajo unido de la dirección, el personal docente y el alumnado, se logró transformar espacios y áreas sucias en áreas limpias y ecológicas y de sano esparcimiento, incluyendo el comedor; en un claro ejemplo de que cuando hay voluntad y decisión todo se puede.
Ya se inauguró el jardín botánico, tomando en cuenta que esta escuela carece de áreas verdes; así como un amplio comedor y un área lúdica con todos los implementos necesarios para pasar un rato de sano esparcimiento durante el recreo. A los que quieren estar en esa zona, se les dan cuerdas para que salten.
Esta transformación se hizo dando respuesta a una petición de los alumnos de sexto grado, quienes quieren dejar un legado a las nuevas generaciones. El proyecto contemplaba ganar espacio para disponer de áreas para conversar, jugar y comer. La labor duró meses, ya que por las tardes los alumnos y padres de familia limpiaban, pintaban, sacaban la chatarra y la basura acumulada y vendían plásticos reciclables para obtener recursos. También se contó con el apoyo de empresarios que donaron toldos y algunos juegos de mesa.
La entrada a estos nuevos espacios será regulada y habrá una maestra responsable de la vigilancia en cada sector. Las áreas fueron bautizadas por los mismos niños: “El jardín botánico”, “El plato del buen comer” e “Imagino lo que queramos”.
Este es un regalo anticipado para el próximo Día del Niño, y de esta manera los alumnos realizaron el cambio deseado.
El proyecto “Espacios vacíos, vamos a darle vida” formó parte del concurso “Diseña el cambio en tu escuela”, organizado por dependencias y televisoras. En mayo se dará el veredicto final del ganador.
El corte del listón inaugural estuvo a cargo de las supervisora Genny Caballero Alpuche, de la zona escolar 08; la directora Martha González Escalante, los directores invitados Manlio Colli Zapata y Gonzalo Pech, así como las profesoras Lucy Carrillo y Sara Rueda, de sexto grados.
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