TIENDITAS, A PUNTO DE LA ANIQUILACION

Dueños de tienditas reconocen que hay temporadas en la que sus pequeños comercios no la ven llegar y que incluso han pensado en el cierre del negocio, sin embargo, señalan, es un negocio familiar que da trabajo por lo menos a varios integrantes de la familia. Indican que a pesar de la reducción en las ventas, hay que continuar con el trabajo y ponerle ganas a lo que se hace, que es de donde sale para mantener a la familia. Consideró que aunque sigue vendiendo los mismos productos, la cantidad que se vende es menor, porque la ubicación de las tiendas de conveniencia es mejor porque se encuentran en las esquinas. Silvia López señaló que la clientela de las tiendas de abarrotes es básicamente de gente de la comunidad y de los estudiantes que acuden a los planteles escolares cercanos, mientras que la competencia capta a transeúntes de la zona. Por su parte, Eloy Mena, manifestó que las tiendas o franquicias tienen la ventaja de que se instalan en las esquinas y funcionan las 24 horas, a pesar de que son más caras, la gente las prefiere, comentó. Expresó que a pesar de que los pequeños comercios mantienen precios más económicos, las tiendas llamadas de conveniencia sí les han quitado público. A su vez, Ligia Canul, sostuvo que la proliferación de tiendas es lo que más afecta a las tiendas de abarrotes porque en una área pequeña se abren varias en poco tiempo, por lo que la competencia se hace cada vez más difícil. Señaló que la tienda tradicional va al día y no cuenta con capital, cosa distinta de los otros negocios quienes al parecer cuentan con otro tipo de financiamiento. Señaló que tiendas como los Oxxo abren de un día para otro sin que las autoridades intervengan y sin que les "importe que le pongan en la torre a las pequeñas misceláneas". Indicó que la competencia con los otros negocios lo obligan a ofrecer mayor cantidad de productos y "jalar" al cliente con variedad y precio justo. Lamentó que la proliferación de este tipo de negocio absorba el mercado y no dan "chance" de que las pequeñas tiendas conserven los empleos que generaron durante muchos años.