Tras siete años de no recibir ningún tipo de mantenimiento, esta mañana dieron inicio los trabajos de remodelación de la inmensa cruz de madera que se encuentra ubicada a la entrada de la iglesia parroquial de la Purísima Concepción y San José.
El vicario cooperador, Pbro. Fausto Castillo Pereyra, informó que la cruz de aproximadamente veinte metros de alto y que está construida de madera de zapote traída de Tzikinzonot contó con el apoyo de varios feligreses que con sus donaciones se pudo lograr la reparación de la cruz emblemática del templo que ya presentaba muestras de deterioro.
Los trabajos cuentan con el apoyo de la grúa del Ayuntamiento (de veintidós metros de extensión) que nos la prestó por dos días que durarán las labores y a parte el equipo de pintores que se dedicarán primero al raspado de la madera y luego el acabado con pintura de color café.
El costo de la obra está valuada en miles de pesos, concluyó.
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