Subrayó que de abril a octubre las tortugas llegan a las costas yucatecas a desovar y aquellos nidos que están en zonas riesgosas, como puede ser al alcance de los humanos, de los mapaches, zorros o de alguna otra situación de riesgo, son rescatados por el programa de conservación de la tortuga marina que implementa la dependencia desde el 2007.
Estos huevos rescatados son colocados en uno de los tres campamentos que tiene instalados la Secretaría en Sisal, Telchac Puerto y Dzilam de Bravo. Aquí en Progreso, el campamento tortuguero se encuentra en el Cetmar a cargo de Jorge Amenica.
Para este año los pronósticos son que se liberen unas 43 mil tortugas.
El Programa de Conservación de Especies Prioritarias, tiene tres campamentos con corrales de incubación para la tortuga marina. Aquí se incuban los huevos que son rescatados de zonas riesgosas y es algo que hace Seduma desde 2007. De esa fecha hasta ayer, han duplicado el número de nidos.
Por ejemplo, en el 2007 en Sisal teníamos 11 nidos, ahora tenemos 162, en Telchac teníamos 34 y ahora son 93, en Dzilam eran 11 y hoy son 51, e incluso en Progreso con el apoyo de otras organizaciones, se tenían 20 y hoy son 30. De estos nidos se tienen de 90 a 100 huevos y logran salir casi todos, reveló.
Esto es una forma de contribuir y dimensionar con la gente de la localidad que es importante respetar a la tortuga marina, porque está en peligro de extinción. Recordó que la tortuga marina es una especie que desova en toda la costa de Yucatán.
Explicó que existen estudios que muestran que las tortugas suelen regresar a desovar donde nacieron, porque al momento de salir del huevo detectan y registran las características de la playa.
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