Uniéndose al llamado para exigir tarifas eléctricas justas, así como transparencia en los factores que calculan su costo, el Poder Ejecutivo del Estado apagó por una hora las luces de Palacio de Gobierno y otros edificios de la administración pública estatal, como una forma de solidarizarse con la sociedad yucateca en su conjunto.
La expresión, que se realizó desde las 7 hasta las 8 de la noche, se replicó en inmuebles gubernamentales que no prestan servicios elementales para los ciudadanos, con la finalidad de sensibilizar a las autoridades federales sobre las afectaciones que ocasionan el alza en los costos de energía eléctrica en la economía de las familias yucatecas, la productividad y competitividad del estado.
El servicio de energía eléctrica solo se suspendió durante ese horario en edificios administrativos y no se aplicó en inmuebles que presenten servicios de salud, campos deportivos, de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) y la Fiscalía General del Estado (FGE), así como aquellos que ofrecen atención directa a los ciudadanos.
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