Los pastores indicaron que dichas almas entregaron sus vidas a Cristo al bajar a las aguas del bautismo en una gran fiesta espiritual enmarcada por la alegría que representa la feligresía adventista.
Los adventistas llegaron desde las 7 de la mañana a bordo de autobuses urbanos de Mérida, camionetas y automóviles.
La bienvenida a los fieles se realizó en el local social de la CTM, que fue el centro de reunión y de ahí se dirigieron por grupos al playón para los bautizos en el mar.
La ceremonia comenzó con un ejercicio de canto, en el que se entonó el himno alusivo al programa evangelístico “Maravillas por la Fe”, que se puso en marcha el año pasado para predicar el evangelio de Cristo.
Asimismo, se impartió un devocional, a cargo del presidente de la Asociación del Mayab, el presbítero Jaime Velásquez y Esaú Córdova Cruz, secretario y tesorero de dicha asociación, en el que se enfatizó sobre la nueva vida en Cristo al bajar a las aguas del bautismo.
El momento solemne del día llegó cuando a las personas, entre niños, jóvenes, adultos, ancianos, matrimonios y familias enteras, se les tomó el voto bautismal para bajar a las aguas y entregar su vida a Cristo y así experimentar su gracia salvadora.
Los adventistas caminaron por grupos al mar, donde fueron recibidos por el cuerpo de 18 pastores que oficiaron la ceremonia para ser bautizados en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo.
En solo una semana se bautizaron un total de 1,023 personas, en el período comprendido de noviembre a mayo, cerrando el evento en la ciudad de Mérida con el pastor Arnaldo Cruz, que es un orador internacional.
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