Las preguntas eran las básicas, para saber las causas del aumento en accidentes mortales en los jóvenes motociclistas de 14 a 29 años. Apoyaron elementos de la Policía municipal.
Se les preguntó si usaban casco, qué tipo, cuántos accidentes han tenido, y sus consecuencias y repercusiones. Este programa es piloto y en este puerto será punta de lanza, para poder aplicarlo en el resto del estado y tal vez a nivel nacional. Es una encuesta denominada “Línea basal”, exclusivamente para motociclistas.
“Una de las causas de las lesiones graves sufridas por los motociclistas es el uso indebido o la ausencia de casco, además de que no son los reglamentarios”, comentaron Alfredo Moguel Cervantes y Yendi Cardozo Aquino, encargados del retén.
“Los cascos de electricistas de color amarillo, tienen que desaparecer, pues no protegen nada en caso de accidentes, así que deben ser los oficiales”, agregaron.
“Otros motociclistas los usan como si fueran peloteros de béisbol, esto es, con la visera hacia atrás y esto puede ser hasta fatal, ya que la aleta extendida se le puede clavar en la cabeza, provocando muerte instantánea”, indicaron.
“Se piensa instalar este tipo de retenes lo más continuos posibles, de 9:00 a 18:00 horas, en lugares aleatorios. Los resultados que se obtengan se mandarán a la Ciudad de México.
“Esto aportará resultados para organizar pláticas de concientización a jóvenes, de que el casco bien usado puede salvarles la vida.
“Existen 3 tipos de cascos: el integral o cerrado, semicasco y el abierto, pero todos tienen que cumplir con todas las normas de seguridad homologadas”, concluyeron.
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