Desde los inicios de la actual administración se ha tratado de mantener un control tanto en las playas como en el malecón de este puerto, moderando la actividad de vendedores ambulantes a través de un programa de la Dirección Municipal de Recaudación Fiscal y la Policía Municipal, con el fin de evitar que los turistas de cruceros sean molestados por dichos comerciantes.
Durante las jornadas turísticas se pudo observar un amplio sector completamente libre de vendedores ambulantes, de los que hay jóvenes, mujeres y hasta niños menores de cinco años. En el caso de estos últimos, son mandados por sus padres con el fin de que ni la policía los pueda tocar.
“Estas medidas drásticas se tomaron sobre todo por los comerciantes informales que por su terquedad y no querer cooperar con las autoridades son retirados constantemente de la zona turística, a pesar de que muchas veces tardamos más en sacarlos que en lo que ya están de vuelta por aquí”, señalan autoridades municipales.
Inspectores de la dependencia indicaron que los operativos constantes están rindiendo sus frutos, ya que se nota que los turistas que llegan a bordo de cruceros pueden descansar tranquilamente sin que nadie los moleste, lo que en la pasada administración no ocurría, pues la playa estaba llena de vendedores ambulantes procedentes de varios puntos del estado.
“Cabe aclarar que estos vendedores no son detenidos, simplemente se les invita de buena manera a que se retiren del área que está prohibida, aunque muchos de ellos creen que es por maldad no dejar que se ganen el sustento para sus familias, pero lo que nosotros hacemos es para el bien del turismo extranjero que nos visita, ya que este lugar cuenta con todas las condiciones para ser un punto turístico de importancia y por lo mismo es relevante reajustar el comercio, sobre todo en materia de ambulantaje”, enfatizaron.
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